Perdida en el mundo de las emociones y los pensamientos, que desencadenan en sentimientos de amor y de odio casi por igual. Algunos hacen daño y provocan un estado como de enajenación mental que nubla a la razón. Los vertimos al mundo para que las personas los vean y eso requiere valor, sin duda. Pero incluye diversos riesgos como ser rechazado, que no sean valorados tanto como quisiéramos o que, incluso, no lleguen a ser percibidos (aún cuando creíamos que sí lo eran).
Los daños pueden ser percibidos con tal intensidad que podrían ser comparables a una verdadera puñalada, incluso directa al "corazón". Ocurre que cuando me quito la máscara, me vuelvo más frágil hacia el mundo que me rodea, como si ésta fuera un auténtico escudo.
En realidad, el auténtico daño me lo hago yo misma porque es proporcional a la intensidad con la que vivo yo mis emociones. Y, obviamente, no necesariamente los demás implicados tienen que tener emociones equiparables a las mías; ni mucho menos una gran empatía, por dicho motivo.
Vivir también es exponerse a ciertos peligros. Porque la bondad absoluta no existe. Porque todos somos egoístas y unos más que otros. Porque no somos todos igual de sensibles ni de empáticos. Por todo eso es frecuente que nos hiramos entre nosotros.
¿Vaya tontería no? De ahí vienen tantos nervios y quebraderos de cabeza, de complicarnos la vida los unos a los otros ó, simplemente, de no tenernos en cuenta. Qué fácil es infravalorar cómo se siente el otro si eso no tiene nada que ver con nuestros propios fines. Egoísmo. El puro egoísmo que mueve al mundo.
Será que en parte es como decía Hobbes y resulta que, en su estado de naturaleza, "el hombre es un lobo para el hombre" y, en consecuencia, el Estado es "un hacinamiento de poder resultante del egoísmo colectivo".
Pero, tras la tempestad llega la calma y, con ella, la reflexión. Así que, bien, corrí un riesgo porque sentía que debía hacerlo. De alguna manera me sentí rechazada e incomprendida a un tiempo. A veces, es como si la gente pudiera rechazar a otros sin decirlo explícitamente ó haciéndolo sin darse la más mínima cuenta.
Claro, yo les entiendo. Pero el amor me vuelve tan irracional a veces... Y, a su vez, como dijo Punset en su día, amor y miedo son proporcionales. Son dos sentimientos que pueden ser tremendamente intensos, pudiendo eclipsar uno al otro.
Y luego está esa lucha entre "el querer ser amado por quien yo amo" y el infinito "miedo a ser rechazado". Ambos se traen un baile de cuidado. Es un gran caos. Pero al final siempre llega una resolución (aunque no sea muy permanente) y entonces te relajas. También te sientes estúpido por esos momentos locos que vivistes quizá tú solo, sin ser correspondido y la posible incomodidad ante esa persona que posiblemente no sintiera lo mismo que tú (¿o sí?). Pero ya da igual.Creo que el momento pasó, si es que alguna vez existió.
sábado, 14 de enero de 2012
miércoles, 4 de enero de 2012
Expectativas y nerviosismo
Se supone que vivir no puede ser de otra manera que aquí y ahora de tal modo que cuando permanecemos más tiempo imaginando o proyectando ilusiones o planes en nuestra mente, que nunca llegan a cumplirse, es entonces cuando permanecemos encerrados en nuestro propio cuerpo. Nuestro cuerpo se transforma en la propia cárcel de nuestra esencia.
Permanece la esencia sin vertirse al mundo que le rodea, en tanto que el término "esencia" equivale a "personalidad", a mi verdadero yo en toda su amplitud, sin censuras. Podría decir, en este sentido, que extravertirse es equivalente a ser.
Y así, sería más correcto decir que alguien es extravertido, que extrovertido.
Por consiguiente, "introvertido" o más correctamente dicho "intravertido" se referiría a cuando estoy en mi cárcel o cuerpo y evito o disminuyo el contacto con mi exterior, con todo aquello que está fuera de mi piel. Sería también el estado que impera cuando me pesan más las decepciones que percibo, que las alegrías efímeras y fluctuantes que se suceden a mi alrededor y que a veces me tocan directamente.
Yo me canso del exterior, por rachas, por momentos... Sobre todo si me lleno de expectativas que no se terminan de cumplir, si permanezco esperando algo que lejos de llegar sólo me mantiene en vilo, en espera constante. Me canso de esperar. Pero aún más que de esto, me canso de mantener un estado de nerviosismo o de tensión como si me preparara para algo que no llega a ocurrir. Me siento estafada y mil veces idiota por continuar sintiendo lo mismo a pesar de los golpes, a pesar de darme cuenta de que doy sin recibir nada a cambio.
Es este mi sino, la lucha constante entre la adrenalina que no desaparece y que provoca el amor y el sentimiento de estupidez que va en aumento conforme pasa el tiempo. Es también la lucha eterna entre la fría razón y el caliente corazón cuya única brújula es la intuición.
¡Y ojalá fuera este mi único problema! Pero las expectativas siempre están ahí, creadas a partir de la observación de los problemas y que desembocan en mí hacia un estado emocional de base un tanto ansioso.
Por otro lado, precisamente para resolver problemas es últil esa tensión o energía, es necesaria. Pero a partir de ahí surge otro problema, cuando esa resolución no llega y la ansiedad comienza a izar su bandera...
Corazón - Carlos Chaouen
Permanece la esencia sin vertirse al mundo que le rodea, en tanto que el término "esencia" equivale a "personalidad", a mi verdadero yo en toda su amplitud, sin censuras. Podría decir, en este sentido, que extravertirse es equivalente a ser.
Y así, sería más correcto decir que alguien es extravertido, que extrovertido.
Por consiguiente, "introvertido" o más correctamente dicho "intravertido" se referiría a cuando estoy en mi cárcel o cuerpo y evito o disminuyo el contacto con mi exterior, con todo aquello que está fuera de mi piel. Sería también el estado que impera cuando me pesan más las decepciones que percibo, que las alegrías efímeras y fluctuantes que se suceden a mi alrededor y que a veces me tocan directamente.
Yo me canso del exterior, por rachas, por momentos... Sobre todo si me lleno de expectativas que no se terminan de cumplir, si permanezco esperando algo que lejos de llegar sólo me mantiene en vilo, en espera constante. Me canso de esperar. Pero aún más que de esto, me canso de mantener un estado de nerviosismo o de tensión como si me preparara para algo que no llega a ocurrir. Me siento estafada y mil veces idiota por continuar sintiendo lo mismo a pesar de los golpes, a pesar de darme cuenta de que doy sin recibir nada a cambio.
Es este mi sino, la lucha constante entre la adrenalina que no desaparece y que provoca el amor y el sentimiento de estupidez que va en aumento conforme pasa el tiempo. Es también la lucha eterna entre la fría razón y el caliente corazón cuya única brújula es la intuición.
¡Y ojalá fuera este mi único problema! Pero las expectativas siempre están ahí, creadas a partir de la observación de los problemas y que desembocan en mí hacia un estado emocional de base un tanto ansioso.
Por otro lado, precisamente para resolver problemas es últil esa tensión o energía, es necesaria. Pero a partir de ahí surge otro problema, cuando esa resolución no llega y la ansiedad comienza a izar su bandera...
Corazón - Carlos Chaouen
lunes, 2 de enero de 2012
Colores
Las personas tienen colores o hay colores que las definen. También son cambiantes. Todo es relativo y por ello los colores se van mezclando... Es algo así como el yin y el yang, lo que "es blanco" tiene algo negro... lo negro tiene un puntito, por lo menos, de color blanco.
El yin-yang sería como una versión esquemática minimalista de lo que es la vida y de lo que son las personas en un momento determinado, dentro de que las personas en tanto que están vivas son cambiantes.
Cierto es que en la edad adulta ya poseemos una personalidad bastante definida, pero también es verdad que los estímulos y/o factores externos tienen la capacidad de alterarnos. Nos pueden alterar sólo por un momento ó para toda la vida.
Colores. Ellos lo llenan todo. La vida que nos queda es un lienzo en blanco y cada uno tenemos nuestra paleta, llena de tonalidades que preferimos, que hemos elegido y otras que nos han tocado. Pero las combinaciones son infinitas y a veces, la mayor fuente de inspiración es admirar el arte que otra persona nos muestra con el resultado de su creación, de la exposición que muestra al mundo ó sólo a unos pocos, en ese momento.
El yin-yang sería como una versión esquemática minimalista de lo que es la vida y de lo que son las personas en un momento determinado, dentro de que las personas en tanto que están vivas son cambiantes.
Cierto es que en la edad adulta ya poseemos una personalidad bastante definida, pero también es verdad que los estímulos y/o factores externos tienen la capacidad de alterarnos. Nos pueden alterar sólo por un momento ó para toda la vida.
Colores. Ellos lo llenan todo. La vida que nos queda es un lienzo en blanco y cada uno tenemos nuestra paleta, llena de tonalidades que preferimos, que hemos elegido y otras que nos han tocado. Pero las combinaciones son infinitas y a veces, la mayor fuente de inspiración es admirar el arte que otra persona nos muestra con el resultado de su creación, de la exposición que muestra al mundo ó sólo a unos pocos, en ese momento.
domingo, 25 de diciembre de 2011
Cómo llegar a tí desde atrás
Y si pudiera llegar hasta a tí desde la espalda sin que apenas te dieras cuenta, sorprendiendo así a tu personalidad perceptiva. Notarías unos suaves labios en tu delicioso cuello, como una brisa fresca que pusiera tus pelos de punta.
Entonces, quieto, te dejarías hacer. Lo sé. Te dejarías hacer, mientras unas manos te desabrocharían la camisa con la mayor dulzura posible. Todo esto con una mezcla de amor y subidón de la libido. Sí, esos sentimientos despiertas en mí cuando te veo... imagínate si te huelo. Imagínate qué podría pasar si te siento, más cerca. Sintiendo ese calor fruto mismo de lo que te conté antes.
Sentir... calor y también la presión de mi pecho contra tu espalda, ahora desnuda. Mis manos en tu torso, recorriéndolo muy lentamente. No hay prisa. Contigo eso es imposible, porque el tiempo me da igual. Sólo me importa este momento, esta situación, aquí y ahora, los dos solos...
Mmm, tu espalda... hablaba de tu espalda... Quiero recorrerla parsimoniosamente desde tu nuca con mis labios. También quiero besarte. Te beso. Lo hago fuerte, intensamente, con algún suspiro que se me escapa, con alguna exhalación al aire. Pero me gusta tu espalda, lo suficientemente ancha, de hombre curtido. Voy de camino a tus caderas y allí me detengo. Te sujeto muy fuerte, con la firmeza proporcional a mis ganas de tenerte.
Te lo puedes imaginar. El final está totalmente abierto.
Ella Fitzgerald - Fever
Entonces, quieto, te dejarías hacer. Lo sé. Te dejarías hacer, mientras unas manos te desabrocharían la camisa con la mayor dulzura posible. Todo esto con una mezcla de amor y subidón de la libido. Sí, esos sentimientos despiertas en mí cuando te veo... imagínate si te huelo. Imagínate qué podría pasar si te siento, más cerca. Sintiendo ese calor fruto mismo de lo que te conté antes.
Sentir... calor y también la presión de mi pecho contra tu espalda, ahora desnuda. Mis manos en tu torso, recorriéndolo muy lentamente. No hay prisa. Contigo eso es imposible, porque el tiempo me da igual. Sólo me importa este momento, esta situación, aquí y ahora, los dos solos...
Mmm, tu espalda... hablaba de tu espalda... Quiero recorrerla parsimoniosamente desde tu nuca con mis labios. También quiero besarte. Te beso. Lo hago fuerte, intensamente, con algún suspiro que se me escapa, con alguna exhalación al aire. Pero me gusta tu espalda, lo suficientemente ancha, de hombre curtido. Voy de camino a tus caderas y allí me detengo. Te sujeto muy fuerte, con la firmeza proporcional a mis ganas de tenerte.
Te lo puedes imaginar. El final está totalmente abierto.
Ella Fitzgerald - Fever
miércoles, 7 de diciembre de 2011
Declaración de intenciones
Fritz Perls y su esposa Laura, dijeron:
"Yo hago lo mío y tú haces lo tuyo.
Yo no estoy en este mundo para colmar tus expectativas,
y tu no estás aquí para colmar las mías.
Tú eres tú y yo soy yo.
Si por casualidad nos encontramos, es hermoso.
Si no, no puede remediarse."
Partiendo del principio de que el amor nace en libertad, nos enamoramos observando al otro desenvolverse en su vida, él libre, él... hermoso, autosuficiente también. Entonces le conoces un poco más, te vas ganando su confianza y tal vez ganes un amigo. La amistad se mantiene pura e incorrupta si "escuchas sin juzgar, estás ahí sin esperar nada a cambio y aceptas al compañero tal y como es".
Amor y amistad son ideas abstractas que mantienen su pureza en la ausencia de pretensiones que sean obligaciones, en consonancia armónica con la idea también abstracta de libertad.
Libertad es ser y dejar ser. Libertad va de la mano de autonomía, refierida a la capacidad de tomar libremente las propias decisiones.
Con todo el amor que tienes dentro, cuando dejas que el otro simplemente SEA, a su antojo y tome sus propias decisiones, entonces le quieres tal y como es. Significa también que le aceptas en todo su conjunto. Quiere y quieres decir "Te quiero así, tal y como eres".
Adele - Someone Like You
"Yo hago lo mío y tú haces lo tuyo.
Yo no estoy en este mundo para colmar tus expectativas,
y tu no estás aquí para colmar las mías.
Tú eres tú y yo soy yo.
Si por casualidad nos encontramos, es hermoso.
Si no, no puede remediarse."
Partiendo del principio de que el amor nace en libertad, nos enamoramos observando al otro desenvolverse en su vida, él libre, él... hermoso, autosuficiente también. Entonces le conoces un poco más, te vas ganando su confianza y tal vez ganes un amigo. La amistad se mantiene pura e incorrupta si "escuchas sin juzgar, estás ahí sin esperar nada a cambio y aceptas al compañero tal y como es".
Amor y amistad son ideas abstractas que mantienen su pureza en la ausencia de pretensiones que sean obligaciones, en consonancia armónica con la idea también abstracta de libertad.
Libertad es ser y dejar ser. Libertad va de la mano de autonomía, refierida a la capacidad de tomar libremente las propias decisiones.
Con todo el amor que tienes dentro, cuando dejas que el otro simplemente SEA, a su antojo y tome sus propias decisiones, entonces le quieres tal y como es. Significa también que le aceptas en todo su conjunto. Quiere y quieres decir "Te quiero así, tal y como eres".
Adele - Someone Like You
domingo, 4 de diciembre de 2011
La búsqueda de la perfección: el autorrechazo
No hay nada más absurdo que creer que las ideas absolutas, los ideales utópicos, son más que eso. Tan absurdo como pensar que sean más que un modelo o una tendencia para modelar la realidad tangible.
De hecho algunas de las alteraciones de la salud psicológicas más frecuentes de nuestros tiempos devienen de la falta de autoestima (autorrechazo) y/o de una búsqueda obsesiva por alcanzar una supuesta perfección, que se suele acompañar con una percepción distorsionada de la realidad.
Cierto es que las alteraciones de salud mentales de nuestros tiempos están muy relacionadas (en los casos que no tienen una base orgánica) con los estilos de vida propios de la época. Sufren el Burn-out (estar quemados) quienes tienen trabajos muy duros o trabajan muy duramente, ansiedad por un estrés demasiado mantenido en el tiempo ó por presiones externas que de tanto machacar acaban llegando hondo dentro de tí, anorexia coadyuvada por una idea globalizada (más que global) de que lo bueno es estar super flacos...etc. Un largo etcétera. Es horrible lo alienante de nuestra sociedad actual.
Incluso ahora la ansiedad y la depresión se llegan a considerar "normales" debido a la frecuencia con la que se dan en nuestros tiempos en los países desarrollados. Así, dependiendo del grado de sufrimiento y de su duración, las alteraciones mentales se diagnostican o no (se consideran procesos patológicos o no). Se me ocurren muchos ejemplos: un duelo es patológico si dura demasiado (si dura un año o más, se podría decir que se requiere ayuda profesional; hay quien dice que es así desde que dura más de seis meses), la tristeza si se cronifica en el tiempo pasa a llamarse depresión...
Para que se hagan una idea ustedes, según un estudio reciente se podría decir que "lo menos frecuente es estar totalmente bien" ya que dice que "lo raro es escontrar a alguien que no presente alguna manifestación clínica de enfermedad psiquiátrica". Claro que no hay que llevarse las manos a la cabeza tanto porque para que se pueda diagnosticar alguna enfermedad de estas es necesario reunir una serie de manifestaciones clínicas, que deben ser las suficientes para que ésto se haga.
Como cada enfermedad tiene sus factores de riesgo normalmente, para las alteraciones del ámbito psicológico, yo destacaría los factores externos como la sociedad y el ambiente en general (por ejemplo un hogar familiar lleno de exigencias y falto de refuerzos positivos y/o familias desestructuradas).
Bueno, dicho todo esto y volviendo a la idea original de hablar sobre el bajo autoestima o autoconcepto. Pienso que aún habiendo tenido mala suerte y haber sido fruto de una familia desestructurada y una serie de condicionantes que puedan haber hecho mella en este sentido; creo que debemos aprovechar la capacidad de buscar dentro de nosotros mismos, si podemos, para descubrir quienes somos realmente. Sería positivo ir sacando a relucir lo bueno que tengamos a cada paso, superándonos a nosotros mismos, demostrándolo y dejando que nos demuestren cuánto nos valoran los demás. Siempre hacia delante. En psicología hay alguna que otra teoría que yo he leído, que dice que el autoestima se gana haciendo eso que te daba miedo (porque a lo mejor en un momento de tu vida no pudiste o no supiste hacerlo), enfrentándote a ello y demostrándote a tí mismo que SÍ puedes hacerlo. Y así iríamos, escalón por escalón. Ganando confianza a medida que vamos superando retos personales, a medida que seguimos viviendo.
De hecho algunas de las alteraciones de la salud psicológicas más frecuentes de nuestros tiempos devienen de la falta de autoestima (autorrechazo) y/o de una búsqueda obsesiva por alcanzar una supuesta perfección, que se suele acompañar con una percepción distorsionada de la realidad.
Cierto es que las alteraciones de salud mentales de nuestros tiempos están muy relacionadas (en los casos que no tienen una base orgánica) con los estilos de vida propios de la época. Sufren el Burn-out (estar quemados) quienes tienen trabajos muy duros o trabajan muy duramente, ansiedad por un estrés demasiado mantenido en el tiempo ó por presiones externas que de tanto machacar acaban llegando hondo dentro de tí, anorexia coadyuvada por una idea globalizada (más que global) de que lo bueno es estar super flacos...etc. Un largo etcétera. Es horrible lo alienante de nuestra sociedad actual.
Incluso ahora la ansiedad y la depresión se llegan a considerar "normales" debido a la frecuencia con la que se dan en nuestros tiempos en los países desarrollados. Así, dependiendo del grado de sufrimiento y de su duración, las alteraciones mentales se diagnostican o no (se consideran procesos patológicos o no). Se me ocurren muchos ejemplos: un duelo es patológico si dura demasiado (si dura un año o más, se podría decir que se requiere ayuda profesional; hay quien dice que es así desde que dura más de seis meses), la tristeza si se cronifica en el tiempo pasa a llamarse depresión...
Para que se hagan una idea ustedes, según un estudio reciente se podría decir que "lo menos frecuente es estar totalmente bien" ya que dice que "lo raro es escontrar a alguien que no presente alguna manifestación clínica de enfermedad psiquiátrica". Claro que no hay que llevarse las manos a la cabeza tanto porque para que se pueda diagnosticar alguna enfermedad de estas es necesario reunir una serie de manifestaciones clínicas, que deben ser las suficientes para que ésto se haga.
Como cada enfermedad tiene sus factores de riesgo normalmente, para las alteraciones del ámbito psicológico, yo destacaría los factores externos como la sociedad y el ambiente en general (por ejemplo un hogar familiar lleno de exigencias y falto de refuerzos positivos y/o familias desestructuradas).
Bueno, dicho todo esto y volviendo a la idea original de hablar sobre el bajo autoestima o autoconcepto. Pienso que aún habiendo tenido mala suerte y haber sido fruto de una familia desestructurada y una serie de condicionantes que puedan haber hecho mella en este sentido; creo que debemos aprovechar la capacidad de buscar dentro de nosotros mismos, si podemos, para descubrir quienes somos realmente. Sería positivo ir sacando a relucir lo bueno que tengamos a cada paso, superándonos a nosotros mismos, demostrándolo y dejando que nos demuestren cuánto nos valoran los demás. Siempre hacia delante. En psicología hay alguna que otra teoría que yo he leído, que dice que el autoestima se gana haciendo eso que te daba miedo (porque a lo mejor en un momento de tu vida no pudiste o no supiste hacerlo), enfrentándote a ello y demostrándote a tí mismo que SÍ puedes hacerlo. Y así iríamos, escalón por escalón. Ganando confianza a medida que vamos superando retos personales, a medida que seguimos viviendo.
viernes, 2 de diciembre de 2011
Continúa el baile
La vida sigue, una va haciendo su camino y cada vez se ve todo más claro. "El camino desde el canal del parto hasta el ataud se hace en soledad." Sí, es cierto en tanto que es relativo su significado. Porque aunque la gente va y viene, el hecho es que no se llega a estar realmente solo, a no ser que te intentes aislar de toda civilización, tipo El Último Superviviente. Pero ni tan siquiera él está solo, porque alguien se le une al viaje y porque siempre consigue encontrar esa civilización partiendo de la nada de un lugar salvaje aparentemente inhabitado.
Queramos o no, somos seres sociales. Queramos o no, nuestra evolución ha ido en el sentido de que seamos seres afectuosos y empáticos. Hacemos nuestros proyectos de vida acompañados, aún cuando la compañía puede variar.
Vimos el otro día una cosa muy chachi en clase sobre los líderes y cómo sacaban partido de las personas para que se superaran a sí mismas y para lograr los objetivos marcados. Y resulta que algo tan sencillo como valorarnos los unos a los otros, motivarnos, escucharnos y aumentar así la confianza que tiene el compañero en sí mismo, nos hace crecer y sacar más partido de nuestras capacidades.
En definitiva, sin los demás... ¡no somos nadie!
PD: Es una entrada un poco anecdótica, pero es que no puede ser todo siempre super serio!
Queramos o no, somos seres sociales. Queramos o no, nuestra evolución ha ido en el sentido de que seamos seres afectuosos y empáticos. Hacemos nuestros proyectos de vida acompañados, aún cuando la compañía puede variar.
Vimos el otro día una cosa muy chachi en clase sobre los líderes y cómo sacaban partido de las personas para que se superaran a sí mismas y para lograr los objetivos marcados. Y resulta que algo tan sencillo como valorarnos los unos a los otros, motivarnos, escucharnos y aumentar así la confianza que tiene el compañero en sí mismo, nos hace crecer y sacar más partido de nuestras capacidades.
En definitiva, sin los demás... ¡no somos nadie!
PD: Es una entrada un poco anecdótica, pero es que no puede ser todo siempre super serio!
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