sábado, 21 de diciembre de 2013

Caliente, caliente

Eres agua que riega esta tierra fértil... Calor y humedad componen el clima de este lugar....
Oh, si quisieras jugar, si quieres jugar...Oh mi querido amigo
Cuidado, con las defensas,  lento pero seguro, con miedo, da igual, hay confianza... te dejaré pasar
Adentro te espera, de la fortaleza, esta princesa que osaste conquistar
Que te quiere, que te quiero conquistar, a tí príncipe de tu paraíso, en tu fortaleza protegido, cuyas puertas abres y comienzas a cabalgar
Cabalga, sube, agarrate, nunca más dejes de trotar

domingo, 17 de noviembre de 2013

El trapecista

Supongo que si uno deja de escucharse a sí mismo y pierde perspectiva, pierde su centro, pierde el sentido de la vida, de quién es y de qué quiere, entonces su visión queda distorsionada. Pero igual se pierde y después se encuentra. Al final ese hombre siempre podrá encontrar su camino, sólo debe escuchar su voz interior y para seguirlo, tener autoconfianza, confianza en sus capacidad de lograr lo que se propone.
Es como un trapecista que debe guardar equilibrio y continuar una fina y clara línea, para lo cual debe confiar en su habilidad y visualizar sin engaños la realidad.

domingo, 4 de agosto de 2013

Háblale al silencio, a la nada, a la Luna,
pero no olvides escuchar tu propia voz,
mírate paseando por tu mundo interior,
¿Cuánto tiempo hace que no paseas sin prisa por allí?
¿Cuándo fue la última vez que plantaste una nueva flor?
Recuerda que incluso el amor debe empezar por uno mismo,
no olvides cuidar tu jardín cada día... o cada noche,
quizá haya que cuidar un poco de esas plantas enfermas,
quizá en poco tiempo sea posible mostrar más de ese lugar.

viernes, 12 de abril de 2013

Llorar las emociones

Desprende de tí la tristeza ,
siente como el ciclo se cierra,
¿hay motivo para dejar que crezca,
 en la soledad de la que se alimenta?

Vierte aquí conmigo tus lágrimas,
no temas que yo también las vea,
llevan dolor pero también tu esencia,
pues tras ellas finalmente te encuentras.

Suéltate de los clavos que te hieren y que atan,
libérate poco a poco de la cruz de tu ansiedad,
comprende que no es un peso que debes cargar

Desprende de tí las emociones,
lentamente  ya no te pertenecen,
a medida que sueltas  desaparecen,
y abraza a lo que ahora acontece,
al abrigo de las otras que te mecen

Aquellas habitaron en tí sólo por un tiempo,
ya que incluso los más ciertos sentimientos,
al igual que la lágrima, eran también perecederos,
y que aunque te suman brevemente en la confusión,
también son más adelante, entendidos desde dentro,
despojando al liberarla, la emoción del pensamiento.


Ahora los recuerdos sólo son cicatrices,
que hoy son acariciadas por el viento,
que en tu libertad sientan como un beso,
como lo fue también la sal de tu lamento

First day after coma. (Explosions in the sky)